El periodo de prácticas tiene una duración de seis meses e incluyen una ayuda económica de 750 euros
La presidenta del Cabildo, Rosa Dávila, valora la buena marcha del citado proyecto e incide en la necesidad de seguir trabajando por la igualdad en el ámbito laboral. “Es un compromiso que hemos adquirido y que se demuestra con la puesta en marcha del proyecto ISOS pero también con otras iniciativas como el fomento del empleo en los municipios tinerfeños en los que se prioriza la participación de personas jóvenes menores de 30 años y desempleadas de larga duración y las mujeres deben suponer al menos el 50% de las contrataciones”. En este sentido, Dávila valoró el trabajo realizado desde la Consejería de Empleo para agilizar la concesión de las ayudas y recordó que “Tenerife se ha convertido en la locomotora de empleo de Canarias y estos logros son una muestra de que estamos en el camino correcto, pero no podemos relajarnos. Seguiremos apostando por políticas de inversión y apoyo a la empleabilidad que impulsen aún más la recuperación y el desarrollo económico de nuestra isla”.
El Cabildo de Tenerife, a través de la Fundación Insular para la Formación, el Empleo y el Desarrollo Empresarial, fomenta la inserción laboral de casi un centenar de mujeres desempleadas quienes se encuentran realizando prácticas en 60 empresas de la isla. Esta iniciativa se enmarca dentro del proyecto ISOS, puesto en marcha en 2018 y del que se han beneficiado hasta ahora 400 mujeres con una inserción laboral del 30 %, una vez finalizadas las prácticas. Además, durante el periodo de prácticas a cada persona beneficiaria se le concederá una ayuda económica de 750 euros. Del mismo modo, además de la ayuda económica por las prácticas, podrán recibir una ayuda para conciliar su asistencia con el cuidado de hijas/os menores de 12 años o de familiares dependientes hasta el segundo grado de consanguinidad (padres, hijos, abuelos, hermanos y nietos del solicitante. En cuanto a la cuantía de la ayuda a la conciliación ascenderá a 100 euros mensuales
Por su parte, el consejero de Empleo y Educación, Efraín Medina, que el perfil de las mujeres participantes son el de personas desempleadas formadas, y sin experiencia laboral a las que se les ofrece la oportunidad de realizar las prácticas en empresas relacionadas con sus estudios dándole prioridad a las profesiones masculinizadas. “Hay que recordar que a pesar del salto cuantitativo que han dado las mujeres en su incorporación al mundo laboral en las últimas décadas y de que en algunos sectores, se haya logrado la paridad; los datos demuestran que la presencia de mujeres es mayor en ocupaciones que tienen relación con los roles y estereotipos que tradicionalmente se les ha atribuido”, indicó Medina.
Del mismo modo, Efraín Medina resalta que la posibilidad de hacer prácticas en empresas “les facilitará introducirse en el mercado de trabajo, al darles la posibilidad de ser más visibles laboralmente, mejorar sus aptitudes en el puesto, desarrollar redes que les resulte útil en el proceso de búsqueda de empleo y en algunos casos por permanecer en la empresa cuando finalicen las prácticas”.
Empresas
En total son 60 empresas las que participan en el proyecto entre las que destacan EAVE, ASD Integral, ACUFADE, BINHEX, Generación 21, Clínica Parque, Asesoría SAG, FEMETE, Eurofins, Centro Infantil el Jardín, Matadero Insular, entre otras. El periodo de prácticas tiene una duración de seis meses, en una empresa de acogida seleccionada por FIFEDE, que en esta ocasión empezó en septiembre de 2024 y finaliza a finales de febrero de 2025
Las mujeres participantes, en este proyecto son desempleadas, residentes en la isla de Tenerife, y tienen una titulación académica ya sea, en formación profesional, certificado de profesionalidad de nivel 1, nivel 2 o nivel 3 o grado universitario. Antes del comienzo de las prácticas han recibido conocimientos en formación relacionadas con habilidades sociales y laborales, como trabajo en equipo, creatividad e innovación, motivación, autoconfianza, comunicación, etc., así como en técnicas de búsqueda de empleo, tanto en métodos tradicionales del mercado como mediante redes sociales o internet.
Las personas participantes dispondrán de un servicio individualizado de orientación, así como de un acompañamiento durante todo el proyecto, incluyendo la prospección o intermediación laboral con empresas para favorecer su inserción posterior.