El Ayuntamiento de San Juan de la Rambla, a través del área de Obras y Servicios que dirige la alcaldesa Fidela Velázquez, concluyó el proceso de licitación de la última fase de las obras de restauración de la Casa Grande de Las Rosas, que con un presupuesto estimado de 795.000€ procedentes de aportación insular (715.500€) y municipal (79.500€), concreta un compromiso de la Alcaldesa para evitar la desaparición de uno de los inmuebles más representativos de la arquitectura doméstica de medianías del siglo XIX dándole un uso que beneficie al entorno, a los vecinos y al desarrollo rural de la zona.
Mesa de negociación del proyecto de restauración
Adjudicada a UTE Asyota-Copisa, la intervención se centra en el inmueble, con una superficie construida de 441 m2, y en el espacio exterior circundante, con una superficie total de 1.100m2. El objeto principal es habilitar la casa mejorando y acondicionando el conjunto arquitectónico para su correcto funcionamiento y puesta en valor, todo ello siguiendo un esquema encaminado a crear un nuevo centro de divulgación e interpretación agrícola con la disposición de espacios de oficina para la administración y dependencias tanto para la formación de jóvenes ganadores y agricultores como para la divulgación del patrimonio agrícola y ganadero, completando el inmueble con baños y vestuarios, recepción, zonas de comunicación y distribución interior, además de otros recintos que se plantearán una vez realizado el levantamiento de la construcción.
En el exterior se plantea la mejora de los accesos, regenerar los muros de contención, definir el perímetro, crear zonas de aparcamiento y espacios al aire libre que permitan la contemplación del entorno y mejoren la movilidad con vehículos y el planteamiento de zonas ajardinadas que aporten calidez poniendo en valor la arquitectura sin restarle vistas ni protagonismo. Una vez ya adjudicadas las obras, el proyecto tiene un plazo de ejecución de 14 meses.
La Casa Grande, localizada en el barrio de Las Rosas, es una construcción aislada de planta rectangular, de dos plantas de altura, con cubierta de teja descompuesta en varias naves, resueltas a dos y cuatro aguas, y una pequeña cubierta plana en el extremo oeste.
De gran interés etnográfico en la zona de medianías, esta casona antigua de uso tradicional cuenta con valores arquitectónicos que contribuyen a caracterizar la arquitectura tradicional rural, contando en sus orígenes con una era y aljibe rematado con brocal octogonal de piedra de cantería.
