Valentín Correa alerta del “crítico” estado de las instalaciones y las precarias condiciones de trabajo del área encargada de la alimentación hospitalaria
El secretario de Organización y portavoz de Nueva Canarias-Bloque Canarista (NC-BC) en Tenerife, Valentín Correa, mostró su preocupación por la crítica situación del servicio de cocina del Hospital Universitario de Nuestra Señora de La Candelaria (Hunsc). Correa y el portavoz parlamentario NC-BC en materia sanitaria, Yoné Caraballo, mantuvieron una reunión con los representantes del personal del área encargada de la alimentación hospitalaria, quienes alertaron de la situación “límite” de un servicio, que ofrece unas 1.100 comidas diarias a los pacientes.
Valentín Correa afirmó que, a través diferentes escritos dirigidos a la dirección del centro y a la Consejería de Sanidad del Gobierno de Canarias, el personal denunció las precarias condiciones del servicio. Instalaciones “obsoletas” con más de tres décadas de antigüedad. Sin separación de zonas para la elaboración de dietas alérgicas que emplean maquinaria y utensilios exclusivos, conlleva al personal a incumplir las condiciones mínimas para la correcta manipulación e higiene de los alimentos, lo que impide garantizar la seguridad y la salubridad de unas elaboraciones que, en consecuencia, están expuestas a sufrir una “contaminación cruzada”.
Otras graves deficiencias denunciadas se refieren a que la salida de la comida para el Tórax coincide con la zona de entrada de mercancías y basuras. La manipulación y almacenaje, añadieron, “no se produce en las condiciones de aislamiento de focos de polución e infecciones”.
Los transportes, continuaron, se producen sin un control adecuado de temperatura e higiene y la existencia de una puerta del almacén que deja entrar la suciedad del exterior provoca que “se pudra todo”, según Correa. Cajas de cartón y verduras almacenadas sin ventilar, donde el género que entra no es revisado y los proveedores que realizan el transporte carecen de las medidas reglamentarias son más irregularidades dadas a conocer a Correa y Caraballo.
El portavoz NC-BC de Tenerife alertó además de que, en el almacén de víveres, no se lleva a cabo un almacenaje correcto, se ignoran en muchas ocasiones las fechas de caducidad, se carece de stock y reposición según las necesidades y tampoco se dispone de la temperatura, ventilación y el control de humedad adecuada.
Las diferentes cámaras de congelación, el almacén de día, los cuartos de frío y de transformación y dietética son “totalmente escandalosos”, denunció. Los testimonios y las imágenes, avisó Correa, “te ponen los pelos de punta por el cúmulo de desperfectos y la falta de higiene”.
En cuanto a la seguridad laboral, los trabajadores de la cocina recogieron los dirigentes canaristas, han denunciado la “sobrecarga y peligro inminente” del aparataje y material de la propia cocina (zona de ollas y fregadero), así como el suelo de la cocina que no cumple la normativa al no ser antideslizante, que ha provocado innumerables accidentes de gravedad, con el consecuente riesgo para la integridad del personal.
“Exigimos al Gobierno de Canarias que adopte, de forma urgente, las medidas para corregir esta lamentable e injustificable realidad” del servicio de este centro hospitalario público, demandaron los dirigentes canaristas. Reclamaron la construcción de una cocina nueva con todos los medios técnicos y humanos precisos para garantizar un “correcto funcionamiento y la seguridad alimentaria”. Yoné Caraballo se comprometió a denunciar esta precariedad en la comisión de Sanidad del Parlamento de Canarias.
Nueva Canarias, según el dirigente tinerfeño, sostuvo que los diferentes escritos dirigidos a la Consejería de Sanidad y a la dirección del hospital, así como las imágenes que apoyan las denuncias del personal, “no dejan lugar a la duda del riesgo” al que están expuestos los pacientes del Hunsc. Sería “inconcebible” que la cocina de cualquier restaurante o cafetería funcionara en estas condiciones, con lo que es “terrorífico pensar que se trata de un centro” público, censuró Valentín Correa.
NC-BC recordó que La Candelaria ha sido sometida recientemente a una de las reformas más importantes de toda su historia. Sin embargo, el área de cocina triplica el número de servicios para el que originalmente fue diseñada.
Valentín Correa valoró de “titánica” la labor del personal para sacar el trabajo cada día en estas “deplorables” condiciones, destacando que “si se consigue que llegue una comida de calidad a las plantas es gracias al esfuerzo y entrega de su personal a pesar de las dificultades que se encuentran día a día”, denunciadas reiteradamente a pesar de ir contra el bienestar de los pacientes.