La metodología antirrumores ha sido la protagonista este año en la Mesa Insular para la convivencia intercultural en Tenerife, una actividad organizada por Juntas En la misma dirección, que se ha celebrado ayer sábado en Puerto de la Cruz
El aumento de llegadas de personas por vía marítima a Canarias de los últimos meses lleva asociado, a su vez, un aumento de los bulos y la propagación de los discursos de odio hacia la población migrante. De ahí que la XVII Mesa Insular para la convivencia intercultural se haya configurado como un espacio de escucha y reflexión conjunta para contribuir a detener el racismo y la xenofobia, a través de la participación de más de cien personas en el Museo arqueológico de Puerto de la Cruz ayer sábado.
A través de esta actividad abierta al público se definen las próximas líneas de acción de Juntas En la misma dirección, la estrategia para la convivencia intercultural en Tenerife, impulsada por el Cabildo Insular y la Universidad de La Laguna. Gilberto Jiménez Martínez es vecino de Puerto de la Cruz y forma parte de Grupo Participación Social, vinculado a la estrategia. Es una de las más de cien personas presentes en esta Mesa Insular, que califica como un espacio donde “adquirir conocimientos de lo que implica la interculturalidad, ya que es algo que atañe a todas las personas. Además, es un lugar de encuentro en el que las culturas que hacen vida en Tenerife intercambian ideas y valores para mostrar nuestros puntos de encuentro”.
Enfocada en la metodología de Estrategia Tenerife Antirrumores, que hoy domingo 19 de noviembre cumple diez años de trayectoria, esta edición se ha planteado como un ágora en la que dialogar entre todos los grupos de participación de la estrategia y las personas asistentes sobre la importancia de actuar frente a los bulos, prejuicios y discursos de odio en materia de diversidad cultural. Un reto para el que, posteriormente, se han dado a conocer de manera lúdica una serie de herramientas antirrumores a través de una gincana.
“Trabajamos principalmente en la creación de narrativas alternativas sobre las personas migrantes, las minorías étnicas y, en general, la diversidad cultural de la isla. De esta forma, tratamos de prevenir el racismo, la xenofobia y la discriminación mediante talleres para enseñar a detectar bulos y rumores, sobre prevención de ciberracismo o también formaciones de agentes antirrumores. También creamos actividades específicas o campañas enfocadas a ámbitos concretos, buscando cómo mejorar la convivencia”, explica Daura Vera, participante de Estrategia Tenerife Antirrumores.
Todo ello desde Puerto de la Cruz, último municipio en sumarse al desarrollo del Marco estratégico para la convivencia intercultural ‘Tenerife vive Diversidad’, que ya está desarrollándose en Adeje, Buenavista del Norte y Granadilla de Abona, así como en los centros educativos CEIP Salamanca, en Santa Cruz de Tenerife; IES Guaza, en Arona; IES El Médano; y en la Fundación Canaria El Buen Samaritano.
Para el concejal de Participación Ciudadana y Ciudad Sostenible del Ayuntamiento de Puerto de la Cruz, David Hernández, este marco estratégico supone “actuar para que la diversidad sea un factor de progreso y no se convierta nunca en un motivo de desencuentro. Para ello es esencial que podamos disponer de marcos de referencia y participar en iniciativas que nos ayuden a mejorar en muchos planos. El Marco insular consideramos que puede aportarnos elementos de valor que necesitamos para avanzar y fortalecer nuestra mirada intercultural”.
Además, Hernández añade “creo que es fundamental que en los procesos participativos y de toma de decisiones de las administraciones nos pongamos al día en todo lo que tiene que ver con la gestión de la diversidad humana y cultural, y claramente desde una perspectiva antirracista, puesto que nuestros municipios son cada vez más multiculturales, complejos socialmente, una realidad que requiere atención desde la esfera institucional, sumando al resto de actores con los que interactuamos de manera habitual. Todo ello comienza con una actualización de las propias estructuras públicas, espejo en el que se puedan reflejar el resto de colectivos, entidades y organizaciones del municipio.
En este sentido, creemos que es prioritario generar y facilitar espacios de participación directa donde, la diversidad cultural presente actualmente en nuestro municipio, manifieste, exprese, sus intereses y necesidades más concretas y que esto pueda ayudarnos a reorientar las políticas públicas municipales y construir un municipio para todas y todos».
Elaborado con la participación de más de 300 personas con múltiples orígenes y basado en la experiencia de más de una década de Juntas En la misma dirección, ‘Tenerife vive Diversidad’ es el plan para gestionar la diversidad cultural con perspectiva intercultural en la isla, aprobado por unanimidad en el pleno del Cabildo insular en el año 2019.
