Las instalaciones ocupan 828 metros cuadrados en total, con nuevas salas de estudio, una cafetería y baños
Después de más de trece años de espera, La Victoria de Acentejo estrenó ayer las renovadas instalaciones de la Biblioteca Municipal, que se ubicada en la confluencia entre las calles Añate y Domingo Salazar, junto al Parque de El Pinar. El acto de inauguración tuvo lugar en la mañana de ayer y contó con la presencia del alcalde de la localidad, Juan Antonio García; la consejera del Medio Natural y Seguridad del Cabildo de Tenerife, Isabel García; y el director insular de Coordinación y apoyo al Presidente, Aarón Afonso, así como de todo el grupo de gobierno municipal.
Los trabajos de ampliación y mejora del recinto han supuesto una inversión global de 718.627 euros, para la que se ha contado con una subvención de 400.000 euros del Cabildo de Tenerife y el resto ha sido sufragado con fondos municipales. “Hoy no solo celebramos la apertura de esta biblioteca, sino nuestro crecimiento como sociedad. Este proyecto supone un antes y un después en el ámbito de la educación y la cultura en este municipio con el que cumplimos un compromiso, sobre todo con los jóvenes”, resaltó el alcalde victoriero.
La consejera insular del Medio Natural y Seguridad, Isabel García, se dirigió especialmente a los jóvenes expresándoles que la biblioteca no es solo un espacio para los libros, “sino también para la convivencia, para compartir, crecer y aprender juntos a manejarse en la vida”.
El director insular de Coordinación y apoyo al Presidente, Aarón Afonso, declaró que los vecinos y vecinas de La Victoria cuentan con unas instalaciones “de primer nivel, sin tener que desplazarse a otros municipios limítrofes para poder contar con salas de estudio y, en definitiva, con una biblioteca del siglo XXI como es esta, un lugar para la cultura y la formación”.
La actuación ha comprendido la reforma y remodelación de los espacios existentes en el inmueble, así como la creación de cuatro nuevas salas de estudio en la planta superior, a la que se sube a través de un ascensor que favorece la accesibilidad del recinto. Asimismo, se ha construido una cafetería junto a la planta baja y nuevos baños, que también podrán ser utilizados por los usuarios del parque.
Se trata de una obra prioritaria que en este caso no solo ha implicado la ampliación del centro bibliotecario, pasando de 665,52 a 828,02 metros cuadrados de superficie, sino que también supone la eliminación de barreras arquitectónicas y la renovación integral del recinto para ganar en funcionalidad y servicios. De igual manera, los trabajos posibilitarán contar con mayor espacio para albergar el fondo bibliográfico del centro, que se cifra en 13.000 ejemplares y se trabaja con el Cabildo para incrementarlo.
Tal y como recordó Juan Antonio García Abreu, “la ampliación y mejora de la Biblioteca Municipal se planteó hace más de trece años e incluso llegó a ejecutarse la cubierta en 2010”. Sin embargo, la obra quedó paralizada durante años y ha sido el actual Ejecutivo local el que retomó el proyecto original, que tuvo que ser modificado con el fin de incluir en él otros espacios como una cafetería y nuevos baños públicos que también están a disposición de las numerosas personas que acuden al Parque de El Pinar.
En concreto, los aseos, por medio de un distribuidor con tres puertas, pueden estar abiertos de forma independiente o conjunta para la Biblioteca, la cafetería y el parque. La reforma y ampliación del recinto ha supuesto ganar 162,5 metros cuadrados de superficie, una nueva ubicación para la entrada principal, que se hace por la calle Añate, y la disposición de una cubierta y un frente acristalado para el espacio central de la biblioteca, de tal forma que este mantiene una gran luminosidad y el contacto con el parque, que actualmente se encuentra en obras.
La biblioteca municipal se encuentra situada desde el año 2004 en la confluencia entre las calles Añate y Domingo Salazar, en la antigua casa de Don Pedro Ramos, que adquirió el Ayuntamiento de La Victoria de Acentejo en el año 1997 junto con la finca en la que hoy se ubica el Parque El Pinar. Se trata, por tanto, de un inmueble de 82 años de antigüedad que fue concebido como una vivienda y no para albergar instalaciones municipales de uso público intensivo como es una biblioteca, de ahí la necesidad de adecuación y modernización de todas sus dependencias.
El proyecto de reforma y remodelación, realizado por Víctor García, un joven arquitecto del municipio, ha permitido sacar el máximo partido a la parcela de 484 metros cuadrados sobre la que se halla emplazado el edificio de dos alturas. Uno de los espacios a los que se ha ganado más superficie útil ha sido al antiguo patio abierto que se ha convertido en una nueva gran sala de 112 metros cuadrados.