Aunque en las últimas ediciones se ha enriquecido con la aportación de colegios y colectivos y familias, la decoración del Festival Internacional del Cuento de Los Silos sorprende año tras año con las auténticas maravillas visuales realizadas por artistas profesionales.
La plaza de la Luz y la trasera del exconvento de San Sebastián, así como algunos espectáculos, se nutren de manos artesanas para crear arte plástico en torno a la temática del Festival. En su XXI edición, el mundo de las hadas y la naturaleza protagoniza las creaciones de Luigi Stinga, Víctor Méndez y Juliana Serrano.
El italiano Luigi Stinga se ha ganado la fama en toda la isla de Tenerife gracias a sus espectaculares esculturas de madera, realizadas en cada caso para diversos festivales a lo largo de la geografía isleña. Al término del mismo, sus obras desaparecen tras ser quemadas. Es el segundo año que Stinga participa en los cuentos de Los Silos. Después de sorprender con la escultura de Rocinante en el Festival dedicado al Quijote, en esta ocasión el italiano ha creado diversos seres de mitológicos, instalados en los jardines y árboles de la plaza de la Luz. “Juego con el atractivo de unir las esculturas de madera natural a los propios troncos de los árboles”, explica. En su obra, que se concibe como un solo conjunto visual, Stinga busca relacionar el mundo del cuento con la naturaleza a través de los espíritus y la metafísica.
En esta ocasión, no todas las esculturas serán quemadas tras el Festival. Algunas de ellas se salvarán de las llamas para decorar próximamente la futura Casa del Cuento silense. Además, el público podrá participar durante el Festival en otra creación de Stinga, escribiendo frases en la madera que posteriormente el artista utilizará para realizar una nueva escultura en la plaza de la Luz.
Víctor Méndez lleva varios años colaborando con los cuentos de su pueblo natal. Su fama la ha cosechado por las gigantescas esculturas diseñadas para presidir la plaza y acoger dentro de ellas sesiones de cuentos. Este año, Víctor recupera el impotente ogro realizado en 2014 para exponerlo en la trasera del antiguo convento de San Sebastián. Junto a él se emplaza la ruta fantástica de esta edición. En ella ha creado un bosque encantado con todo lujo de detalles en el que es posible perderse y quedar maravillado durante el Festival.
A Víctor Méndez le acompaña este año Juliana Serrano. La artista de Puerto de la Cruz ha diseñado los elementos de la ruta y también la ha decorado junto a Víctor. Es su primera vez en el Festival… y no solo como trabajadora. “Había oído hablar de él, pero nunca había venido. El entorno es muy bonito y estoy encantada de poder conocer gracias a mi trabajo Los Silos y el Festival en profundidad”, señala Juliana.
Pero Víctor y Juliana no solo han estado al mando de la ruta fantástica. También han preparado los elementos de las noches de terror, uno de los espectáculos más esperados por los asistentes al Festival. Buscar la calidad artística al mismo tiempo que se transmite miedo es, sin duda, el gran reto de ambos artistas.