Avanzado estado de las obras de recuperación, devolviendo la estructura, cubierta y la distribución interior respetando el estilo de la época y dotándola de modernos sistemas de comunicación para convertir el espacio en un centro polivalente
El alcalde de San Juan de la Rambla, Ezequiel Domínguez, supervisó ayer los trabajos que se están realizando para recuperar la Casa Grande del barrio de Las Rosas, comprobando de primera mano cómo está evolucionando la obra que va a devolver al municipio uno de los inmuebles con mayor interés etnográfico de la comarca, siendo muestra de la arquitectura canaria rural de mediados del siglo XVIII.
Acompañado del grupo de Gobierno, el mandatario local subrayó el avanzado estado de recuperación en el que se encuentra el inmueble, al que ya se le ha devuelto prácticamente la totalidad de la cubierta, se han recuperado y asegurado los muros de contención y perimetrales, se ha fijado la estructura interna y se está trabajando en la recuperación de ventanas, puertas y suelos, respetando “al milímetro el tipo de material utilizado en la construcción original. Es de destacar la ímproba labor del equipo encargado, que ha entendido perfectamente nuestra idea y se está esforzando para que los vecinos de Las Rosas vuelvan a ver la Casa Grande tal como era, respetando el mismo tipo de construcción, los materiales usados, la manera de aplicarlos e incluso la misma tonalidad en paredes, ventanas y puertas”.
“Del mismo modo que se respeta la construcción original del siglo XVIII, se está dotando a la Casa Grande de avanzados sistemas de comunicación y conexiones, una nueva red eléctrica puntera y sostenible, un sistema antiincendios acorde a la normativa, tratamientos de protección y plaguicidas a las maderas usadas para techos, suelos, ventanas y puertas, hormigón de alta calidad y resistencia y una nueva red de suministro de agua y evacuación de estudiada eficacia. Todo ello convertirá a la Casa Grande en un edificio polivalente que será de mucha utilidad para el desarrollo de acciones futuras de diversa índole”, añadió Domínguez.
Durante la visita, la encargada de la obra, realizada por UTE Asyota-Copisa, confirmó que se prevé que los trabajos concluyan el próximo mes de agosto.
Cabe recordar que la intervención se centra en habilitar la casa mejorando y acondicionando el conjunto arquitectónico para su correcto funcionamiento y puesta en valor como centro de divulgación e interpretación agrícola, con la disposición de espacios de oficina para la administración y dependencias tanto para formación de jóvenes ganadores y agricultores como para divulgación del patrimonio agrícola y ganadero, completando el inmueble con baños y vestuarios completos, recepción, zonas de comunicación y distribución interior, además de otros espacios que servirán como salas polivalentes.
En el exterior se ejecuta la mejora de los accesos, la regeneración de los muros de contención definiendo el perímetro, la creación de zonas de aparcamiento y de espacios al aire libre.
Las obras cuentan con un presupuesto estimado de 795.000 euros procedentes de aportación insular (715.500) y municipal (79.500). Tienen un plazo de ejecución de 14 meses.
La Casa Grande es una construcción aislada de planta rectangular, de dos plantas de altura, con cubierta de teja descompuesta en varias naves, resueltas a dos y cuatro aguas, y una pequeña cubierta plana en el extremo oeste.