La Asociación de Desarrollo Local Icod de los Trigos- San Juan de la Rambla cree que «las reuniones y movilizaciones de los agricultores de la isla para analizar, estudiar y objetar los canales de comercialización de la papa, bajo el paraguas del sindicato agrario COAG, sus representantes en Tenerife y numerosos colectivos agrarios, son tremendamente necesarias para reivindicar un precio justo de nuestra papa, además de propiciar la autonomía de nuestra gente del campo«
Esta asociación quiere mostrar su solidaridad con los representantes del sindicato agrario COAG en Tenerife y los agricultores de las distintas zonas agrícolas de la isla que están reivindicando un precio justo para la papa que cultivan. «Desde nuestro colectivo, señala su secretario Javier González, queremos recordar que llevamos más de diez años luchando para dignificar un cultivo que va desapareciendo y menguando año tras año en nuestra isla, debido, entre otras cuestiones, a la disminución de la superficie de cultivo auspiciada por las enfermedades y plagas que se ignoran, no investigan, y generan nulo interés para los políticos responsables del sector primario de Tenerife. Además de lo expuesto, el escaso relevo generacional en el sector de la papa, tampoco parece crear inquietud alguna en nuestros representantes».
La realidad descrita no alcanza al consumidor final de las áreas metropolitanas de nuestras islas, «pues la gran mayoría de los medios de comunicación social además de la propaganda institucional que propugna el Cabildo de Tenerife y el Gobierno de Canarias, se encamina a “vender” la papa como el gran producto “gourmet” de Canarias y España, sin preocuparse en absoluto por su producción y protección», subrayan.
Además de lo anterior, la Asociación quiere manifestar que el Cabildo de Tenerife «debe desarrollar el Plan Insular de la Papa que lleva guardado en algún cajón o gaveta insular muchos años, invertir en la urgente y necesaria investigación científico- técnica participativa que sigue necesitando la plaga de la Tecia Solanivora en el campo y, finalmente, continuar con la investigación iniciada y desarrollada por el Instituto Canario de Investigaciones Agrarias (ICIA) que consistía en controlar la diseminación de Tecia Solanivora en el interior de las Islas Canarias mediante el saneamiento de tubérculos de papas de semilla y consumo en almacén, utilizando atmósferas controladas enriquecidas en dióxido de carbono, y establecer un método cuarentenario que permita asegurar que los tubérculos quedan libres del insecto en cualquiera de sus fases de desarrollo».
