Icod de los Vinos celebra este fin de semana el tradicional arrastre de las Tablas de San Andrés. Será esta tarde noche, en la víspera, y mañana sábado día 30.
Vecinos y visitantes saborean por San Andrés el vino nuevo, las castañas y la carne cochino. El silencio se rompe en la Ciudad del Drago con esta arraigada tradición secular de “correr las tablas”, convirtiéndose así en una de las manifestaciones más autóctonas de la isla de Tenerife.
Aunque se arrastra mucha gente por las calles de San Antonio y la de Hércules, así como en los barrios del municipio, sin duda es la calle del Plano la que pone el mayor espectáculo. Su gran longitud y pendiente y la inmejorable panorámica que ofrece para los espectadores, han convertido a esta vía urbana como la más señera y representativa de “las tablas”.
El origen
Cuentan que surge la tradición por el antiguo trabajo diario del transporte de la madera. En la zona alta de Icod se localizaba un aserradero para abastecer las necesidades constructivas de la población y para la fabricación de barricas de vino. Los animales de carga transportaban a una persona que iba colocada en la parte posterior de los tablones y que dirigía la madera desde el aserradero situado en lo alto de la calle San Antonio, que se encontraba unida a lo que actualmente es la calle Hércules y la calzada de Alzola.
Los que se arrastraban en las tablas se ayudaban con unos “remos” de haya o brezo, lo que les servía para frenar al final del trayecto y para ir esquivando las piedras, así como para dar mayor velocidad a los tablones.
Una tradición con mucho futuro
Hoy en día, correr las tablas en la víspera y en el día de San Andrés es una auténtica fiesta en Icod en honor al vino con la apertura de las bodegas, adquiriendo esta singular celebración gran popularidad en toda la geografía insular tinerfeña.
Fotografías cedidas