Todo un reto técnico ha supuesto traer hasta la Villa y Puerto de Garachico el amplio montaje de la ópera La traviata, de Giuseppe Verdi, que se representará en un imponente escenario al aire libre instalado en la Glorieta de San Francisco. Será ésta la primera vez que un proyecto lírico de este tipo se realiza en estas condiciones. Las representaciones se celebrarán este sábado y domingo, 9 y 10 de junio, a las 21:00 y a las 18:00 horas, respectivamente.
Las entradas para asistir a esta producción del Cabildo se pueden adquirir al precio general de 10 euros y 5 euros para los menores de 27 años, a través de los canales habituales del Auditorio de Tenerife; en taquilla de 10:00 a 19:30 horas; por internet a través de www.auditoriodetenerife.com; o por teléfono en el número 902 317 327. También estarán a la venta en el ‘Bazar Cas Cayo’, ubicado en la calle Francisco Martínez de Fuentes en Garachico, y en la Administración de Lotería ‘Carmencita Tosco’, en la calle San Agustín de Icod de los Vinos.
Como previa a las dos representaciones del fin de semana, este martes se inauguró en el Espacio TEA de Garachico la exposición ‘La traviata, virtudes públicas, vicios ocultos’, en la que se puede contemplar hasta el próximo domingo una serie de paneles que dan a conocer el proceso de creación de esta producción realizada íntegramente en Tenerife. También se podrán ver dos vestidos femeninos de época confeccionados por el departamento de sastrería del Auditorio de Tenerife.
Verdi y el papel de la mujer en el siglo XIX
Asimismo, también este martes se celebró en el mismo espacio una charla impartida por el intendente de Ópera de Tenerife y director de escena de la representación, Alejandro Abrante, quien desgranó los detalles de todo lo relacionado con la vida de Giuseppe Verdi (1813-1901) y las condiciones que lo rodearon para escribir la ópera más representada en el mundo.
Abrante inició la charla explicando que la obra se basa en la vida real de Marie Duplessis, famosa cortesana francesa cuya vida inspiró “La dama de las camelias”, de Alexandre Dumas, novela que a su vez influyó en Verdi para componer esta magnífica obra.
La traviata es una ópera en tres actos con libreto del italiano de Francesco Maria Piave. Se estrenó en el teatro La Fenice de Venecia el 6 de marzo de 1853. Esta obra de Verdi provocó un escándalo en sus primeras representaciones por el talante de su heroína, todo un icono de la libertad femenina, y el carácter intimista que le imprime Verdi. Inspirada en Marie Duplessis, Violetta Valéry es una cortesana que se enamora de un noble, Alberto, pero su relación se verá interferida por el padre de éste, Germont, que finalmente redime a los enamorados aunque ya sea demasiado tarde. Como en todas las grandes historias del siglo XIX, el destino de la protagonista, un personaje en constante evolución que está lleno de matices, será inevitablemente trágico.
Durante la charla, a la que asistieron más de cuarenta personas entre las que se encontraba el alcalde garachiquense José Heriberto González, y el concejal de Cultura, Rafael González, Abrante hizo también referencia a la historia de la propia pieza comentando que cuando se estrenó en el citado año 1853 fue “un rotundo fracaso”, porque era demasiado larga.
Alejandro Abrante, tras detallar diversos aspectos como la composición de la orquesta, la misma que estuvo en el Paraninfo de La Laguna hace unos días, concluyó con un reconocimiento al ayuntamiento de la villa y puerto y a su alcalde, afirmando que “en este pueblo se apuesta por la cultura y la educación”. Al término de la charla, el regidor municipal tomó la palabra para agradecer “al Cabildo la apuesta por Garachico como primera sede para sacar la ópera de un recinto cerrado a un espacio al aire libre”, al tiempo que puntualizó que “en Garachico demostramos con hechos que apostamos por la cultura como inversión, porque hay muchas personas que viven de la industria cultural directa e indirectamente”.
Esta producción del Cabildo a través de Ópera de Tenerife cuenta con Alessandro Palumbo como director musical, el mencionado Alejandro Abrante como director de escena; Jorge Cabrera como escenógrafo; Javier Caballero como diseñador de vestuario y Miguel Ponce como diseñador de luces.
Este montaje forma parte de la iniciativa Ópera Pocket, un modelo de difusión del teatro lírico diseñado para que pueda itinerar por varios escenarios de la isla sin renunciar a la escenografía y vestuario de calidad que caracterizan a este género musical dramático.