El incendio forestal que azota la isla tinerfeña sigue fuera de control y afecta ya a 8.400 hectáreas y un perímetro de 70 kilómetros. Los trabajos en la actualidad se están centrando en proteger a las personas y defender los núcleos poblacionales, según explicó en la comparecencia informativa de esta noche el presidente de Canarias, Fernando Clavijo, asegurando también que la velocidad del viento puede afectar en el avance de las llamas en las próximas horas.
Clavijo ha informado también que la franja sur está estable, mientras que la zona norte se ha logrado estabilizar un 20 %, pero insiste en que el difícil acceso complica las labores de extinción.
El fuego afecta a los municipios de Arafo, Candelaria, Güímar, El Rosario, La Victoria, Santa Úrsula, La Orotava, La Matanza, El Sauzal, Los Realejos y Tacoronte, donde más de 12.000 personas han sido preventivamente desalojadas.
No se ha perdido ninguna vivienda
La presidenta del Cabildo insular, Rosa Dávila, ha informado que, hasta el momento, ninguna vivienda se ha visto afectada por el fuego. Sin embargo, ha insistido que la prioridad es salvaguardar la vida de las personas, incluyendo a los trabajadores que luchan contra el fuego. “Si hay riesgo para las vidas, nos replegaremos”, ha recalcado.
Dávila ha señalado que la noche de este sábado se espera que sea una de las más complicadas desde que comenzó el incendio. Asimismo, la mandataria insular ha informado que se ha procedido a evacuar la zona de la Corona Forestal siguiendo el asesoramiento de los técnicos para centrar los trabajos en esta zona.
Esta noche se contará con 343 efectivos y por la mañana se incorporan 23 medios aéreos.