El equipo de gobierno de Icod de los Vinos (PSOE, PP, SI y Cs) afirma que “CC impulsa la construcción de dos enormes diques de escolleras en la playa de San Marcos” con el proyecto de la Viceconsejería de Turismo del Gobierno de Canarias.
El alcalde José Ramón León (SI) afirma que su antecesor en el cargo, Francisco González “ha descubierto sus cartas apoyando y defendiendo públicamente un proyecto que supondrá el fin de la playa y que el ejecutivo canario ha mantenido oculto durante más de un año”. Resalta León que “sólo cuando supieron que el ayuntamiento tenía conocimiento del proyecto por un viaje que realicé a la Dirección de Costas en Madrid, se han dado prisa en darlo a conocer”.
Los elementos fundamentales que han generado temor e incertidumbre en el gobierno local son los dos enormes diques. Uno situado en la parte oeste, que comienza al inicio del acantilado en dirección hacia la playa y paralelo a la costa. Tiene una longitud de unos 100 metros y una anchura de 21 en su base, y una altura de cinco metros sobre el mar. El otro, en la parte este, sale al pie de las escaleras de acceso hasta el muelle, ocupando parte de la propia playa con una longitud de 111 metros y 12 metros de ancho”.
A las afirmaciones de Francisco González de que este proyecto es un borrador y que hay otras alternativas, el alcalde responde que el proyecto que le mostró Turismo “es el mismo que le entregaron en Madrid. No hay otro proyecto y en él se aprecian de manera absolutamente destacada las dos grandes escolleras que lo anulan por desproporcionadas”.
José Ramón León recuerda que “el 14 de marzo tuvo lugar una reunión en la que, por primera vez, tras el viaje a Madrid, la Viceconsejería de Turismo se ofreció a explicar el proyecto. En ese encuentro expuse las razones por las cuales consideramos que este proyecto es inviable y no responde a las promesas iniciales de que se harían obras blandas con la colocación de pequeños sacos rellenos de callaos que se ponían al pie de la muralla, una obra que podía ser retirada si no funcionaba. Nos han engañado”, enfatiza el alcalde.
Así, señala el regidor local icodense, “todo para quitar unas reflexiones de las olas que han existido toda la vida, y que no han afectado nunca a la arena de la playa, que sólo se vio alterada a partir de 1984, como muy bien explica Costas. Las reflexiones del oleaje no son la causa de la pérdida de arena y, por lo tanto, Costas no aprueba el gasto de dos millones de euros en una cosa que no garantiza nada. A pesar de ello, la viceconsejería, espoleada por el empecinamiento del anterior alcalde, continúa con el proyecto”.
León añade que “otra de las gravísimas consecuencias del proyecto es la limitación del atraque de las embarcaciones que queda reducida a un espacio de 15 metros, cosa increíble que sólo puede realizar alguien que desconoce la playa de San Marcos y su oleaje, pues por poca mar que haya será imposible que las embarcaciones puedan ser subidas o bajadas por la grúa sin correr un serio riesgo. El proyecto también elimina aparcamientos en la vía que va desde la rotonda al muelle y elimina todos los que están detrás del muelle”.
Concluye el alcalde de la Ciudad del Drago sosteniendo que “el proyecto de nuestro gobierno es poner en uso la playa de manera inmediata aportando arena si es posible del fondo marino. Hay dinero para ello, que proviene por cierto del gobierno central y no del Gobierno de Canarias. Con ello se alcanzaría una superficie de playa similar a la de este proyecto, y luego estudiar el posible retranqueo del muelle, no trasladarlo como dice CC, recuperando el muelle chico y volviendo la playa a su estado inicial, como pide el pueblo”.
Fuente: Periódico El Día
