El Gobierno de Tacoronte despide 2024 firmando el acta de ocupación de los terrenos anexos al actual Centro de Salud de la ciudad, de 1.640 m2. La operación, impulsada gracias a una ficha presupuestaria de 656.000 euros, da luz verde a la ansiada transformación de esta parcela ubicada en una de las principales entradas al municipio. En una primera fase se convertirá en un amplio espacio de estacionamientos mientras que, a largo plazo, este suelo hará posible la ampliación del centro sanitario y la construcción de una residencia de mayores gestionada por el IASS.
El Consistorio tacorontero logró culminar el pasado 20 de diciembre este expediente histórico que garantiza el uso público futuro de un área que consigue ampliar su superficie hasta los 4.870 m2. Para ello se ha tenido que modificar de manera puntual el Plan General de la localidad, cambiando el uso residencial del solar a equipamiento socio sanitario, y activando un proceso de expropiación a la entidad bancaria propietaria del mismo.
Este hecho histórico se produce 40 años después de la adquisición por parte del Ayuntamiento del terreno de 5.248 m2 donde actualmente se localiza el Centro de Salud. A principios de 1986 se comenzó a construir el inmueble, con proyecto firmado por el arquitecto José Oñate, y en abril del año siguiente inicia su andadura, una realidad que permitió paliar uno de los problemas más importantes de la ciudad: la precaria asistencia de la sanidad primaria.
Con la firma del acta de ocupación se fijan los cimientos del futuro proyecto de ampliación del Centro de Salud y el nuevo espacio sociosanitario de Tacoronte, entre la Carretera General del Norte (Tf-152) y la Avenida V Centenario. Las futuras construcciones previstas en la zona irán acompañadas por varios puntos ajardinados y una nueva vía con la que se facilitará la entrada y salida a este importante entramado de servicios públicos.
Una modificación necesaria
Para garantizar la construcción futura de los inmuebles destinados a uso sociosanitario se ha tenido que desarrollar una modificación previa del planeamiento urbanístico de Tacoronte, transformando el anterior uso residencial que presentaba el documento en suelo para equipamientos sanitarios y de atención a la ciudadanía vulnerable. “La única posibilidad de crecimiento del complejo sanitario actual es precisamente hacia los terrenos que hemos conseguido para la ciudad”, apunta Tarsis Morales, concejal de Urbanismo, quien subraya “la idónea localización” de los mismos “para garantizar la materialización de este importante proyecto para la ciudadanía tacorontera”.
La alcaldesa Sandra Izquierdo, acompañada por la primera teniente de alcalde, Noemí García; el segundo teniente de alcalde y concejal de Servicios Sociales, José Caro; y los ediles Tarsis Morales y Eduardo Dávila, visitaron días atrás el entorno del Centro de Salud para conocer in situ la envergadura del proyecto que en breve comenzará a tomar forma.
“Con estos terrenos cumplimos con uno de los grandes objetivos marcados en el pacto de Gobierno que firmamos al principio del mandato y colocamos la primera piedra del que será el gran espacio sociosanitario de Tacoronte”, apunta la máxima dirigente local. Izquierdo reconoce su satisfacción por este “paso histórico”, al tiempo que hace una llamada al resto de Administraciones Públicas para que “demuestren su implicación con los problemas reales del municipio comprometiendo las inversiones necesarias que permitan transformar estos terrenos en un centro de salud de primer nivel y en el centro de mayores 24 horas que necesitamos para nuestros vecinos y vecinas de avanzada edad”.
A la espera de la financiación necesaria para hacer posible los grandes proyectos marcados para este enclave de la ciudad, el Gobierno local procederá a lo largo de 2025 al adecentamiento y limpieza de toda la parcela, con el fin de ponerla a disposición de la ciudadanía como espacio provisional de estacionamientos. Los trabajos incluyen la demolición de un viejo inmueble de hormigón ubicado en la zona, así como el desmonte del terreno, transporte de escombros y preparación del nuevo terraplén, además de la creación de jardineras y colocación de equipamiento urbano. Para el desarrollo de estas tareas se ha estimado un gasto aproximado de unos 100.000 euros, sufragado de igual manera a través de fondos directos de las arcas municipales.
