El próximo domingo 3 de mayo se celebra el Día de la Cruz, y con él una de las tradiciones de mayor arraigo dentro del conjunto de fechas señaladas del calendario ramblero. San Juan de la Rambla cuenta en la actualidad con cuatro decenas de cruces que cada año son enramadas por grupos familiares, vecinos, colectivos o asociaciones, que se reúnen en torno al lábaro manteniendo una costumbre que ha pasado de generación en generación desde tiempos pretéritos.
Dado que este año la situación que está atravesando el país por la crisis del COVID-19 hace imposible desarrollar el Día de la Cruz con la normalidad festiva habitual, la concejalía de Ferias, Festejos y Romerías que dirige la edil Priscila Díaz, se ha propuesto mantener de alguna forma la costumbre y no dejar las cruces sin el correspondiente ornato característico, por lo que desde esta misma semana se está trabajando para dotar de adornos florales a cada una de las cuarenta cruces recogidas en el “Rutómetro”, documento que se edita de manera anual recogiendo la geolocalización de cada una de ellas.
“Desde hace décadas enramar la cruz es una cita obligatoria para cientos de vecinos. Dejar las cruces sin embellecer por la situación actual nos parecía injusto tanto para nuestros ciudadanos como para nuestra propia historia, por eso desde el Ayuntamiento regalaremos un adorno floral a cada cruz, que será colocado por nosotros mismos para que al menos se mantenga la tradición aunque no reciban las visitas habituales”, explica Díaz.
Cabe recordar que de manera general el Consistorio viene desarrollando una programación habitual para este día que, entre otras iniciativas, ofrece un concurso que premia a la mejor ornamentación. Este año las actividades han sido canceladas, pero la programación se mantiene para desarrollar en el 2021, retomando, tal como apunta la concejala encargada “el desarrollo de la tradición con total normalidad una vez sea salvada esta situación excepcional”.
