Asamblea Unificada del Pueblo (AUP)-Sí se puede critica al gobierno de San Juan de la Rambla por relegar a su grupo de las reuniones vecinales convocadas para debatir colectivamente sobre el cambio del nombre de la Avenida José Antonio Primo de Rivera, “una medida que no se puede eludir por la aplicación de la Ley de Memoria Histórica, que es de obligado cumplimiento, como todas las leyes”, asegura el portavoz del grupo municipal ecosocialista en el Ayuntamiento del norte de Tenerife, Juan Siverio.
AUP-Sí se puede propuso cambiar el nombre a la avenida con una moción defendida en el pleno celebrado en diciembre pasado. Para abordar la decisión, “la alcaldesa, Fidela Velázquez, convocó solo a parte del vecindario y ocultó la reunión a nuestro grupo municipal”, destaca Siverio. “Exigimos a Velázquez respeto hacia una oposición que siempre ha sido respetuosa con el gobierno, la alcaldesa puede encontrarse con nuestra cara más contundente si no hay un cambio de actitud”.
El malestar del concejal es notorio, toda vez que “al impedir la presencia de AUP-Sí se puede se nos ha negado el derecho que tenemos como grupo político a explicar directamente nuestra moción a la ciudadanía y se ha promovido dar una falsa intención de desentendernos de la iniciativa al no acudir a una reunión de la que desconocíamos su convocatoria”.
Siverio añade además que las personas invitadas a la reunión fueron solo el vecindario de la avenida, cuando toda la ciudadanía de San Juan de la Rambla podría haber opinado sobre el nombre de la vía principal del casco. “Esto es una actuación que tampoco se puede admitir, menos aun cuando el grupo de gobierno presume de haber creado el reglamento de participación ciudadana y lo incumple sistemáticamente, como en esta ocasión”, dijo.
El portavoz de AUP-Sí se puede detalla que “en diciembre presentamos esta moción porque, a pesar de que el partido del grupo de gobierno, el PSOE, ya se había planteado la iniciativa años atrás, decidieron dejarlo de lado porque entonces se creó mucho revuelo y prefirieron eludir afrontar situaciones difíciles ante el vecindario, algo que nos parece intolerable en cuanto el cumplimiento de la ley, pero mucho más aún cuando esa actitud timorata viene del partido que promovió el impulso de la Memoria Histórica como un conjunto de acciones de justicia reparadora tan necesaria en nuestra sociedad”.
La moción impulsada en diciembre por AUP-Sí se puede plantea que no se mantenga el nombre de la Avenida de José Antonio, “al hacer referencia a un personaje histórico que se encuentra fuera de los valores democráticos, constitucionales y del estado de derecho actuales”, y que este nombre se sustituya por otro consensuado con la ciudadanía de San Juan de la Rambla.
La moción incluye también que se analice el resto de símbolos de corte pre-constitucional que se encontraran en lugares públicos de la villa, por si procediera aplicar la citada Ley de Memoria Histórica en otros casos similares al de la Avenida José Antonio. La organización ecosocialista es partidaria de “salvaguardar la memoria y reparar en la medida de lo posible los daños ocasionados” por el régimen no constitucional anterior al actual sistema democrático, aunque se trate de una reparación simbólica.
