En la sesión del Pleno del Ayuntamiento de Puerto de la Cruz celebrada el pasado 30 de diciembre, se aprobó con el voto a favor del gobierno municipal y la abstención del grupo municipal socialista, la modificación de la Ordenanza Fiscal del Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI), con efectos a partir del 1 de enero de 2026.
Esta decisión se enmarca dentro de un esfuerzo más amplio por parte del Consistorio para aliviar la carga fiscal sobre los ciudadanos, especialmente en un contexto donde el Gobierno central ha impuesto medidas que obligan a todos los Ayuntamientos a incrementar la cuota de la tasa de gestión de residuos para cubrir los costes del servicio.
Con este enfoque, el Ayuntamiento busca no solo compensar a los contribuyentes del municipio, sino también implementar políticas fiscales que favorezcan a las familias y promuevan el acceso a la vivienda, respondiendo así a las necesidades y preocupaciones actuales de los vecinos.
Las medidas aprobadas en la modificación de la Ordenanza Fiscal son las siguientes:
- Bajada del tipo de gravamen del IBI: Se reducirá del 0,53% al 0,52%.
- Ampliación de la bonificación por familia numerosa: Se eliminará el límite de renta, beneficiando a todas las familias que ostenten dicha condición: un 70% para las familias de categoría general y un 90% para aquellas de categoría especial.
- Nueva bonificación del 95% en la cuota del impuesto: Esta bonificación se aplicará a los bienes inmuebles de uso residencial destinados al alquiler con renta limitada.
El Concejal de Hacienda, Pedro Antonio Campos, quien presentó la propuesta al Pleno, declaró: “Con estas medidas queremos demostrar nuestro compromiso con los ciudadanos, especialmente con las familias más vulnerables. La reducción del IBI al 0,52% y la ampliación de las bonificaciones para familias numerosas son pasos
concretos hacia un sistema fiscal más justo y equitativo. Además, la nueva bonificación para inmuebles destinados al alquiler con renta limitada estimulará la puesta en el mercado de más vivienda”.
El alcalde Leopoldo Afonso también apoyó estas iniciativas: “Es fundamental que el Ayuntamiento actúe en beneficio de nuestros vecinos. Con el incremento previsto en la cuota de la tasa de gestión de residuos impuesto por el gobierno central, estas medidas son esenciales para mitigar el impacto económico que esto tendrá en las familias portuenses. Nuestro objetivo es crear un entorno más favorable y accesible para todos”.
Estas medidas están diseñadas no solo para aliviar la carga fiscal, sino también para fomentar el acceso a la vivienda y apoyar a las familias con más necesidades.
