La infraestructura ubicada en el Parque Nacional del Teide ha sido rehabilitada después de haber sido dañada durante el incendio forestal de 2023
El Cabildo de Tenerife ha reabierto ayer el Jardín Botánico del Centro de Visitantes El Portillo, en el Parque Nacional del Teide, tras culminar los trabajos de rehabilitación por los daños sufridos en el incendio forestal de 2023. El acto, que ha contado con la presencia de la presidenta del Cabildo, Rosa Dávila; la consejera de Medio Natural, Sostenibilidad y Seguridad y Emergencias, Blanca Pérez; el director del Teleférico del Teide, Ignacio Sabaté; ha servido para designarlo como ‘Jardín Botánico Wolfredo Wildpret’, en homenaje al biólogo y catedrático de Botánica de la Universidad de La Laguna, también presente en el acto.
Rosa Dávila indicó que se trata “de un día importante porque hemos recuperado la parte del Jardín Botánico que se vio afectada por el incendio del año pasado y además lo hacemos rindiendo homenaje a la figura de Wolfredo Wildpret. Es un honor que este espacio lleve el nombre de este embajador de nuestros paisajes y guardián de nuestra biodiversidad”. La presidenta de la Corporación insular indicó que en el Jardín Botánico “se han cultivado más de 70.000 plantas propias de la zona que servirán para que el Parque Nacional del Teide recupere su esplendor” y aseguró que el objetivo es cultivar 138.000 plantas autóctonas hasta 2026.
Blanca Pérez señaló que “el Jardín Botánico de Wolfredo Wilpred es un auténtico tesoro que nos está permitiendo trabajar en la repoblación del Teide. Gracias al trabajo conjunto de Teleférico del Teide, Tenerife Renace y la Fundación Foresta podemos seguir impulsando esta labor, tras la recuperación de este importante espacio que acoge el vivero de plantas autóctonas”.
Por su parte, Ignacio Sabaté cree que hay que acordarse de miles de personas que el año pasado hicieron un esfuerzo titánico durante semanas por defender el medio natural de nuestra isla. Esta inauguración también es un homenaje a ellos y a don Wolfredo, que no solamente es una eminencia a nivel internacional, sino que fue la persona que nos ha enseñado a miles de canarios a querer a la naturaleza, a querer a la botánica, a acercarnos y a conocerla”.
Wolfredo Wildpret agradeció el acto y recordó que “siendo presidente del Patronato del Parque Nacional del Teide luché para que este Jardín Botánico saliera adelante. Ahora lo veo como una realidad no histórica sino como una realidad presente, con futuro y con posibilidades. Veo que el camino es bueno y si encima de eso tengo aquí a las autoridades que tienen la responsabilidad de luchar por esta bendita isla, vamos por buen camino”.
Las labores de rehabilitación se han realizado dentro del proyecto Tenerife Renace que está canalizando las ayudas de las entidades privadas que quieren colaborar en la restauración ambiental tras el incendio. Los trabajos han sido dirigidos por el Cabildo y ejecutados por la Fundación Foresta y han sido financiados por Teleférico del Teide. En concreto, se ha sustituido el vallado de protección afectado y se ha restaurado la zona del estanque y humedales, impermeabilizándolo e incluyendo para ello plantas para naturalizarlo. Además, se ha retirado todo el matorral quemado y algunos pinos quemados, que se han astillado posteriormente y reutilizados para la contención de suelo.
El Jardín Botánico está situado en las proximidades del Centro de Visitantes de El Portillo y abarca una superficie de cuatro hectáreas en donde se han venido introduciendo ejemplares producidos en el vivero con el objeto de integrarlos en la vegetación existente y proceder al etiquetado de cada una de las especies con el nombre vulgar y científico; familia botánica a la que pertenece; plano con distribución geográfica, tanto en la isla como, en su caso, en el archipiélago canario.
El Jardín Botánico de El Portillo forma parte de la Asociación Internacional de Jardines Botánicos. Además de para disfrute y contemplación públicos, desarrolla una importante labor en la conservación y rescate de la flora del parque nacional, ya que el vivero que dispone de semilleros, invernadero, sombrajo, laboratorio y estación. Para recorrerlo en su totalidad se han acondicionado unos 1.200 metros de sendero y destaca la adaptación de una parte significativa del recorrido a personas con movilidad reducida, lo que permite recorrer gran parte en silla de ruedas y con carritos de niños.
El vivero del Jardín Botánico de El Portillo cuenta con una superficie de más de 40.000 metros cuadrados en donde se desarrolla todo el ciclo de la planta: la selección de semillas, crecimiento en invernaderos y en zonas de acondicionamiento climático, la plantación controlada y protegida y la definitiva cuando adquiera el porte necesario para su supervivencia. Los viveros de plantas endémicas son fundamentales para la repoblación de espacios porque ayudan a preservar la biodiversidad local y a restaurar ecosistemas específicos. Al producir y plantar variedades endémicas, se fortalecen las poblaciones naturales, se protegen especies en peligro de extinción y se promueve la restauración de hábitats degradados como los que quedaron en las zonas afectadas por el incendio forestal. Esto contribuye significativamente a la conservación del medio ambiente y al equilibrio ecológico.