Artículo de opinión de Oscar Izquierdo, presidente de FEPECO
Llevamos muchos años diciendo que, en Canarias no hay valentía política para afrontar con operatividad los grandes y también los menudos problemas que padece nuestra tierra, reclamando que la política tiene que ser un servicio público, dirigido a solucionar todos los obstáculos que imposibilitan una mayor calidad de vida y un mejor bienestar social.
Dicen que rectificar es de sabios, sin querer pasar por uno de ellos, si hay que valorar positivamente la gallardía que está poniendo el Gobierno de Canarias, para desafiar el grave problema que sufrimos por la falta de vivienda, tanto pública, como privada, queriendo dar un vuelco radical a lo que no se ha hecho hasta ahora, para empezar a ejecutar cuanto antes la construcción de vivienda pública e incentivando al sector privado, para que aporte y contribuya a la construcción de inmuebles protegidos.
Es una oportunidad para sacar adelante medidas reales, necesarias, urgentes y prioritarias, ante la demanda social tan fuerte de casas que existe en todas las islas. Sería deseable la colaboración entre todos los agentes implicados en el proceso constructivo, para poner en el mercado el mayor número de viviendas, en el menor tiempo posible.