Sí se puede celebra que el juzgado haya archivado la demanda por acoso laboral contra los concejales ecosocialistas de Buenavista Antonio González Fortes y Vanesa Martín Évora, cuando ambos formaban parte del grupo de gobierno municipal en el Ayuntamiento de este municipio en el mandato anterior. La decisión del Juzgado de primera instancia e instrucción número 2 de Icod de Los Vinos desestimó el pasado 2 de mayo la denuncia penal en la que la demandante reclamaba indemnización de más de 200 mil euros por supuesto acoso laboral.
Aunque todavía cabe la posibilidad de que la demandante recurra la decisión, Sí se puede considera que este último pronunciamiento judicial sobre el caso confirma las decisiones tomadas por el juzgado de lo social en 2015 y por la sala de lo social del Tribunal Superior de Justicia (TSJ) en 2016, que se pronunciaron en la misma línea.
El exalcalde y actual portavoz de Sí se puede en Buenavista, Antonio González Fortes, ha asegurado que con esta decisión judicial “los tribunales coinciden en señalar como infundadas unas acusaciones que solo tenían por objeto desprestigiar nuestra imagen ante las elecciones municipales”, celebradas en mayo de 2015.
La historia de esta denuncia se remonta a unos meses antes de las elecciones municipales de mayo de 2015, cuando, en diciembre de 2014, una trabajadora del Ayuntamiento de Buenavista –gobernado durante ese mandato por el grupo municipal de Sí se puede– presentó denuncia por lo penal y demanda por lo social contra los dos concejales citados y tres trabajadores municipales por supuesto acoso laboral.
Casi dos meses después de las elecciones, en julio de 2015, el juzgado de lo social nº 7 desestimó íntegramente la demanda, una decisión que fue ratificada por la sala de lo social del TSJ a principios de mayo de 2016, cuando desestimó el recurso de suplicación. La reciente decisión del Juzgado de primera instancia e instrucción número 2 de Icod de Los Vinos se refiere a la misma denuncia, presentada por la trabajadora en el ámbito penal.
“La denuncia se interpuso en diciembre de 2014, aunque la propia denunciante aseguraba que la situación denunciada venía desde 2012”, subraya González Fortes para recalcar el objetivo electoralista de la iniciativa llevada a cabo por la demandante. El portavoz ecosocialista recuerda que en esta maniobra se intentó mezclar a tres técnicos municipales “que hicieron siempre su labor con seriedad” y que “afortunadamente, tampoco han resultado afectados por la denuncia”.
El exalcalde González Fortes llama la atención sobre este tipo de prácticas “rastreras” que pretenden influir sobre los resultados electorales por “las vías antidemocráticas del desprestigio sostenido por acusaciones falsas”. Sin embargo, “aunque el proceso ha resultado hasta cierto punto doloroso, es una demostración de que nuestros rivales políticos no confían en sus propias capacidades para hacerse cargo con dignidad del gobierno municipal y se ven necesitados de recurrir a este tipo de artimañas”.