El personal de las oficinas del Servicio CEDRE se reunieron con la adjunta segunda, Milagros Fuentes, y la adjunta de Igualdad y Violencia de Género, Beatriz Barrera
El personal de las oficinas oficiales del Servicio para la Asistencia y Orientación a Víctimas de Discriminación Racial o Étnica del Consejo para la Eliminación de la Discriminación Racial o Étnica (CEDRE), órgano colegiado adscrito a la Dirección General para la Igualdad de Trato y Diversidad Étnico Racial del Ministerio de Igualdad, se reunieron con la adjunta segunda, Milagros Fuentes, y la adjunta de Igualdad y Violencia de Género, Beatriz Barrera, para presentar el Servicio del CEDRE, así como los principales resultados de la Memoria anual del Servicio en 2022.
Las dos oficinas oficiales del Servicio del CEDRE presentes en el territorio están a cargo de la Comisión Española de Ayuda al Refugiado (CEAR) en la provincia de Las Palmas y Cruz Roja en la provincia de Santa Cruz de Tenerife. Ambas tienen como objetivo principal prestar una atención integral y coordinada a las víctimas de incidentes discriminatorios por motivos raciales y étnicos y dar respuesta a las necesidades específicas de las mismas mediante la intervención de un equipo técnico especializado en el abordaje de la discriminación y los delitos de odio.
El personal del Servicio del CEDRE se encarga de asesorar y acompañar a quienes acuden al mismo en las actuaciones que deseen llevar a cabo: interlocución, negociación, mediación, interposición de una queja, reclamación o denuncia y derivación a otros recursos, entre otros. Las representantes de las oficinas oficiales del Servicio del CEDRE en Canarias trasladaron a las adjuntas que existe discriminación racial en Canarias para acceder a los recursos sociales de las islas, “una discriminación tanto explícita y directa como indirecta que se produce por el origen racial o étnico de las personas”.
Igualmente, trasladaron que un gran número de casos de discriminación que se producen también en otros ámbitos no se denuncian. Las adjuntas, Milagros Fuentes y Beatriz Barrera, establecieron vías de trabajo con ambas oficinas oficiales con el objetivo de colaborar en la defensa de los derechos de las personas que se enfrentan a discriminación racial o étnica.