‘Barrios por el Empleo’ apoya a las personas en situación de sin hogar en su inserción laboral

3 minutos de lectura

La consejera de Empleo, Desarrollo Socioeconómico y Acción Social, Carmen Luz Baso, explica que el objetivo es “prestar un servicio lo más ajustado posible a las necesidades de las personas que se encuentran en esta situación y ayudarles a reintegrase en la sociedad”

El Cabildo de Tenerife, a través del programa ‘Barrios por el Empleo: Juntos más fuertes’, ofrece un servicio de acompañamiento y apoyo personalizado a las personas en situación de sin hogar o que están en riesgo de perder su vivienda para facilitarles el acceso y mantenimiento a un puesto de trabajo. En lo que va de año se ha atendido a cerca de 80 personas a través de este servicio especializado, que opera en toda la isla, ofreciendo a las personas participantes acciones personalizadas y adaptadas a sus circunstancias para mejorar tanto la búsqueda proactiva de empleo como sus competencias y capacidades profesionales.

El servicio, gestionado por Cáritas Diocesana de Tenerife bajo la coordinación de la Fundación para la Formación, Empleo y Desarrollo Empresarial (Fifede), dependiente del Cabildo, incluye un diagnóstico y valoración inicial a cargo de una especialista para determinar las prioridades y desarrollar un itinerario de inserción, en función de sus competencias personales y técnicas.

La consejera de Empleo, Desarrollo Socioeconómico y Acción Social, Carmen Luz Baso, explica que el objetivo es “prestar un servicio lo más ajustado posible a las necesidades de las personas en situación de sin hogar y ayudarles a reintegrase en la sociedad”. En este contexto, explica que ‘Barrios por el Empleo’ no solo se centra en mejorar su empleabilidad sino que, “una vez que obtienen un empleo, se les hace un seguimiento para asegurarse que pueden gestionar las situaciones a las que se enfrentan en su nueva situación laboral”.

Según explica Chaxiraxi González Hernández, técnica de empleo de este servicio, “el colectivo es muy heterogéneo, por ello el plan de trabajo es individualizado y adaptado a las circunstancias y necesidades de cada persona”. Hay participantes que viven en centros alojativos y tienen las necesidades básicas cubiertas y otro porcentaje más elevado de personas que han tenido una vida social normalizada  y que ahora están en peligro de perder su hogar y no han tenido las capacidades para saber gestionar la situación.

“Todas ellas experimentan una situación emocional y psicológica muy vulnerable. El hecho de no tener una vivienda afecta a su desarrollo personal y de vida y desencadena otras situaciones, como la pérdida de una red de apoyo o la baja autoestima, que tienen que ser atendidas en paralelo para garantizar el bienestar social de la persona”, señala. La participación en este servicio contempla una formación a la carta, adaptada a las necesidades particulares de cada persona. En ocasiones, se busca reforzar o reciclar conocimientos ya adquiridos y en otros reorientar a nuevos sectores el perfil profesional o trabajar en la adquisición de competencias para el empleo.

Al mismo tiempo, un número importante de personas participantes recibe formación en competencias digitales con el fin de que puedan aprender a usar otros canales en la búsqueda activa de empleo y consigan el empleo de manera autónoma. Reinaldo, uno de los participantes de este servicio destaca que el hecho de no tener una vivienda le ha dificultado mucho las labores de búsqueda de empleo, además de ocasionarle otras consecuencias desde el punto de vista social y emocional. “Perdí todo, pero ahora, gracias a la ayuda que me han prestado a través de ‘Barrios por el Empleo’, he conseguido formarme en el área sociosanitaria y reorientar mi búsqueda hacia un nicho de mercado donde he conseguido trabajo”.

El servicio de atención a personas en situación de sin hogar es uno de los servicios dirigidos a colectivos vulnerables que ofrece ‘Barrios por el Empleo: Juntos más Fuertes’, un programa en el que, bajo la coordinación de Fifede, también participan Don Bosco Salesianos Social, Cruz Roja, la Fundación General de la Universidad de La Laguna y Sinpromi con un objetivo prioritario: mejorar la empleabilidad.

En los primeros seis meses de este año, este servicio especializado ha acogido a 76 personas participantes, de las que más de la mitad, en torno a un 53%, ha recibido formación y un 26% han conseguido un empleo. El  40 % de las personas participantes son mayores de 45 años y un número destacado posee un bajo nivel de estudios o no dispone de estudios homologados por lo que deciden prepararse para mejorar sus posibilidades de inserción laboral formaciones de este tipo.

NOTICIA ANTERIOR

Vivienda registra casi 4.000 solicitudes en los primeros diez días de la puesta en marcha del Bono Alquiler Joven en Canarias

SIGUIENTE NOTICIA

Puerto de la Cruz promociona la formación en competencias digitales para su ciudadanía