Los nacionalistas, a través de Rosa Dávila y Carlos Alonso, registran una decena de alegaciones con más de sesenta propuestas que son el resultado de multitud de reuniones con colectivos, asociaciones, técnicos ambientales y expertos en sostenibilidad, entre otros
Coalición Canaria (CC) de Tenerife presentó hoy sus alegaciones al Plan de Uso y Gestión del Parque Nacional del Teide, un plan con el que el PSOE “pretende robarle el Teide a los tinerfeños con un documento que se ha hecho a espaldas de los ciudadanos y que está repleto de carencias, errores metodológicos y de procedimiento”. Los nacionalistas, con estas alegaciones y propuestas, exigen al Gobierno la retirada inmediata del plan y que su redacción comience desde cero con una “participación real”.
En total, Coalición Canaria de Tenerife registró un total de 10 alegaciones que contienen más de 60 propuestas con el objetivo de que “se regule el uso y gestión del parque, garantizando la integridad de sus valores y que se haga compatible la conservación del espacio con los aprovechamientos tradicionales, con un uso público, respetuoso e informado por parte de ciudadanos y con el desarrollo económico del mismo y su entorno”
Las alegaciones, registradas en el Cabildo de Tenerife y dirigidas a la Consejería de Transición Ecológica y Lucha contra el Cambio Climático, fueron presentadas por la secretaria de Organización de Coalición Canaria de Tenerife y diputada autonómica, Rosa Dávila, y por el portavoz de CC-PNC en el Cabildo de Tenerife, Carlos Alonso, que estuvieron acompañados por varios consejeros y diputados nacionalistas.
Estas alegaciones y propuestas, según explicó Dávila, son el resultado de las “decenas de reuniones que los nacionalistas hemos mantenido con numerosos colectivos, asociaciones y entidades afectadas, con la participación de técnicos medioambientales, responsables de gestión, de expertos comprometidos con la sostenibilidad y de actores socioeconómicos y responsables sectoriales”.
“El Teide es Patrimonio de la Humanidad, pero, sobre todo, es patrimonio de las y los tinerfeños comprometidos con la defensa de sus valores, que quieren que sus volcanes, cráteres y ríos de lava petrificada estén cada día ambientalmente más cuidados y, al mismo tiempo, desean seguir disfrutándolo con un acercamiento ordenado, informado, respetuoso y comprometido”, explicó Dávila.
“Por eso, no vamos a permitir que el PSOE nos quiera robar el Teide a los y las tinerfeñas, porque el parque requiere un documento de calidad que lo regule, acorde con lo que representa”, sentenció.
Por su parte, el portavoz nacionalista en el Cabildo de Tenerife, Carlos Alonso, explicó que este documento socialista “presenta gravísimas carencias técnicas, ha sido desarrollado sin una efectiva garantía de participación ciudadana y persigue un modelo de gestión plagado de inconsistencias, carente de justificación normativa y con numerosas prohibiciones infundadas que, lejos de ordenar, pretende restringir un acceso y uso ordenado, responsable y respetuoso del parque por parte de los habitantes de la isla y de numerosos colectivos”.
En este sentido, insistió que el actual documento presenta una “grave falta de motivación, justificación y sustentación tanto técnica como ambiental, incurriendo en una clara arbitrariedad en las medidas propuestas por el PSOE y que no responde a la realidad de los hechos ni a razones científicas o ambientales de ninguna clase”.
Las propuestas nacionalistas, además de exigir la retirada del plan y solicitar un nuevo proceso con una participación real, van encaminadas a la compatibilidad de las actividades deportivas en la reglamentación del uso público del PRUG, la compatibilidad de las actividades tradicionales de aprovechamiento apícola, las actividades de caza tradicional y el control cinegético, la habilitación de un albergue de montaña eco-ambiental, las actividades relacionadas con el sector audiovisual y cultural, las actividades de visita al parque y su uso turístico y la distinción entre ambos, así como la vigilancia, seguridad, control y accesibilidad universal.