Se aboga por la regularización, pero no por la prohibición. Y se pide empezar de cero el proceso
El alcalde de La Orotava, Francisco Linares, compareció este martes junto a su equipo de gobierno para mostrar el rechazo al nuevo Plan Rector de Uso y Gestión (PRUG) para el Parque Nacional del Teide y expresó la preocupación con este asunto ante las numerosas quejas de la ciudadanía y de múltiples colectivos. El primer representante institucional incidió en que se aboga por la regulación, por la protección y el control como es lógico. “Estamos a favor de un plan con sentido común, pero no con un documento que se basa en la prohibición”, por lo que concluyó pidiendo que “se devuelva y comience desde cero, ampliando los plazos y dejando que la ciudadanía participe».
“El Parque Nacional del Teide es de Tenerife y no de los políticos de turno ni de los técnicos, y un documento de esta envergadura que regulará el Parque durante los próximos 30 años necesita más tiempo, más debate y más reflexión”, aseveró. En esta línea también expresó la inquietud ante la preocupación que le han trasladado diversos colectivos afectados como apicultores, senderistas, deportistas… “personas que de seguro sí cuidan el parque”.
Otro de los aspectos que preocupa-subrayó Linares- es la seguridad, pues de 24 horas, no menos de doce está sin vigilancia. Y en este sentido también reclamó que se vuelva a instalar en el parque un espacio para la Guardia Civil, como estaba hasta hace unos doce años. En esta línea explicó que los agentes de la guardia civil y de la policía local de La Orotava son los que tienen que acudir ante cualquier incidencia, estando a una hora de distancia.
También es muy preocupante el Plan de Movilidad en el que se contempla cómo ser realizarán los desplazamientos y estacionamientos dentro del parque, entre otras cosas. Linares mostró su total rechazo a que los residentes paguen, y continuó con su defensa de que los turistas sí deben abonar, aunque sea un euro para el mantenimiento del paraje, ya que le supone al cabildo una inversión anual de cuatro millones de euros. Aunque con respecto a este punto también apuntó que sí habría que hacer reflexión de cuántas visitas debe soportar el parque ya que recibe más de cuatro millones al año, siendo el primero de España y segundo de Europa.
El alcalde también manifestó su sorpresa por la aparición en estos días en prensa de una imagen de las infraestructuras que se podrían destinar para los estacionamientos, y aseveró que de contemplarse en el plan realmente esta gran construcción en el parque y entorno, pues está previsto en tres puntos, “me opondré activamente como alcalde pues simplemente es inadmisible y no es el espíritu filosófico que tiene el parque”.
También abogó por la creación de un albergue público, mimetizado en el entorno, pudiendo usarse espacios ya existentes y adaptarlos, con el fin de que los ciudadanos tengan la oportunidad de alojarse y disfrutar también en este entorno.
Linares detalló que el Parque Nacional tiene una superficie de 19.000 hectáreas, aproximadamente, de las que 13.000 (casi un 70%) es de La Orotava, y por ello el municipio aporta recursos propios para cubrir servicios como la recogida de residuos sólidos. Además, históricamente, y antes de que fuera declarado parque nacional en 1954, ha sido cuidado y protegido por los vecinos de la villa, en especial por los de la zona de los altos, y de los municipios colindantes. Así, son catorce las localidades de la isla que colindan con este espacio natural, “a los que también se les debería consultar y contar con su opinión”.