Ricardo Fernández de la Puente señala que el alumnado ha tenido que adaptarse a un nuevo método de enseñanza y, sin embargo, no todas las familias cuentan con los recursos necesarios para ello
El portavoz y diputado de Ciudadanos (Cs) en el Parlamento de Canarias, Ricardo Fernández de la Puente, lamenta que «las Islas ostenten el amargo título de situarse a la cola de los hogares que cuentan con posibilidades para que los estudiantes puedan acceder a la educación online, que ha sido fundamental durante la pandemia».
Fernández de la Puente pone en valor el peso que ha adquirido la enseñanza digital en los últimos tiempos, que ha obligado tanto a equipos docentes como al alumnado a adaptarse a un nuevo método de enseñanza y aprendizaje con el uso de nuevas tecnologías.
“Para los niños y jóvenes que han tenido que modificar sus hábitos de estudio, obligados por la situación sanitaria, no ha sido fácil, y menos aún lo ha sido para quienes no han contado con los materiales necesarios para ello”, agrega. En este sentido, el diputado de Cs recuerda que, según el estudio ‘El uso de la tecnología por los menores’, publicado recientemente por el Observatorio Nacional de Tecnología y Sociedad (ONTSI), Canarias se sitúa en los últimos puestos del ranking de la llamada ‘tele escuela’, con un 90% de hogares preparados para la educación online.
“No es posible que en pleno siglo XXI exista un 10% de los alumnos canarios que no puedan seguir la enseñanza telemática”, apunta, por lo que urge a las administraciones públicas a poner remedio a esta desigualdad.
“Está claro que el reparto de tablets que ha realizado el Gobierno de Canarias para que los alumnos puedan continuar con su aprendizaje en sus hogares ha sido insuficiente y no podemos continuar permitiendo que haya una brecha digital en las familias que no cuentan con recursos propios para acceder a internet”, puntualiza. En este sentido, apunta que “una familia con varios hijos y escasos recursos no podrá nunca facilitar la educación a sus hijos si no dispone de una ayuda extra”. Por eso, insta a las administraciones a buscar la fórmula que permita a los menores un acceso real a la educación online.