En menos de un minuto el panorama gubernamental de dos gobiernos insulares cambiará para expulsar a Coalición Canaria del poder. A la propuesta de moción de censura que PSOE y PP han presentado esta mañana en el Cabildo de La Palma se suma el acuerdo alcanzado por Cs, PSOE y Podemos para echar a la formación nacionalista de la Corporación tinerfeña. Si esta propuesta se termina de formalizar, con la pérdida del Cabildo de Fuerteventura, ahora en manos del socialista Blas Acosta, los nacionalistas dejarán de poseer tres instituciones regionales.
El consejero de Ciudadanos (Cs) en el Cabildo de Tenerife, Enrique Arriaga, ya preparaba este martes sin la autorización de la dirección nacional y regional de su partido esta moción de censura para arrebatar al nacionalista Carlos Alonso la Presidencia del Cabildo.
Esta medida la lleva a cabo bajo la amenaza de la expulsión inmediata del partido si seguían adelante pero varias fuentes apuntaban que «tampoco se puede rechazar el clamor de la mayoría de los comités locales, que no quieren un pacto con CC», como exige Madrid.
María Concepción Rivero (Ciudadanos) ha afirmado que se cumplen los preceptos de su partido, ya que Podemos no entrara en el gobierno. «Dentro de las líneas programáticas del partido lo que está prohibido es formar gobierno con Podemos», ha puntualizado.
Carlos Alonso denuncia «transfuguismo y falta de ética«
Carlos Alonso ha denunciado que la moción de censura presentada contra él por PSOE, Ciudadanos y Podemos «se sustenta en el transfuguismo y la falta de ética, además de que el gobierno insular será rehén de la extrema izquierda».
Los dos consejeros de Ciudadanos, que han sido expedientados y suspendidos cautelarmente de militancia por firmar la moción de censura son, según Alonso, «dos tránsfugas» y el PSOE se dispone a incumplir el pacto contra el transfuguismo al pretender llegar al gobierno insular con su apoyo.
La única alternativa que plantean los grupos censurantes frente al gobierno insular «centrado y moderado» de Coalición Canaria y el PP se resume en que «hay que echar a Coalición Canaria», lamentó Carlos Alonso en declaraciones a los periodistas.
Aunque Podemos haya anunciado que no participará en el gobierno insular, el Cabildo será «rehén» de ese partido, advirtió Alonso.
«El PSOE ha preferido eliminar su papel central en la política y colocarse en la extrema izquierda, con Podemos como aliado», afirmó.
Alonso dijo no obstante que «hay que aceptar las reglas del juego, aunque se sustenten en la ausencia de ética», de manera que si triunfa la moción, él y todos los consejeros de Coalición Canaria se mantendrán en la oposición «para seguir contribuyendo a que Tenerife mejore».
Señaló que dado que el Tribunal Constitucional mantiene suspendidas las previsiones legales que limitaban la participación en mociones de censura de los consejeros expulsados de sus partidos no espera que desde una perspectiva jurídica se pueda frenar.
Pero desde un punto de vista ético consideró que podría haber «una reflexión» en el PSOE sobre una moción que se sustenta en «dos tránsfugas» de quienes ya «no espera mucho».
Aseguró que esta misma mañana, pocas horas antes de que se presentara la moción de censura, el consejero de Ciudadanos Enrique Arriaga le había negado en su despacho que hubiera ninguna operación en marcha y se había comprometido a votar a favor de la estructura de gobierno insular acordada entre CC y PP.
«Así que desde el punto de vista ético no me espero mucho», dijo Alonso, quien subrayó que «obviamente» se mantendrá en la oposición en el Cabildo si la moción, convocada para el 24 de julio a las 12.00 horas, prospera.
Fuente: El Día y Agencia EFE