El área de Carreteras del Cabildo de Tenerife tiene previsto actuar hoy en Garachico para rellenar con hormigón una oquedad que amenaza la estabilidad de la vía TF-42, a su paso junto a la playa del muelle viejo. El alcalde de la Villa y Puerto, José Heriberto González, confirmó ayer al periódico El Día el inicio de los trabajos para acabar con «este socavón que se ha encontrado bajo el muro de contención de la carretera».
González subraya que la obra de relleno de esta oquedad «permitirá recuperar la seguridad en una zona donde podría producirse una desgracia en el futuro y reanudar las obras de la rampa de acceso a la playa del muelle, después de la Semana Santa». La intención del gobierno es que la nueva rampa esté lista en junio.
Este socavón se detectó durante las obras de demolición de la deteriorada rampa de acceso a esta playa. El alcalde recordó que «al excavar en una parte de la rampa, se descubrió un socavón que se introduce unos tres metros de profundidad hacia el interior de la carretera que une Icod y Buenavista del Norte (TF-42)».
El hueco, probablemente generado por la acción erosiva del mar durante varios temporales marítimos, ha causado «un descalce evidente del muro de contención de la acera y de la propia carretera», alertó González.
Esta circunstancia no se había detectado en los estudios geotécnicos realizados antes de redactar el proyecto de mejora de la seguridad de la rampa, por lo que la dirección facultativa decidió paralizar las obras «hasta que la situación fuese analizada por técnicos de Carreteras del Cabildo».
El informe de los técnicos insulares indicó que «no había un riesgo inminente de desplome del muro y de parte de la carretera», pero que era necesario actuar de inmediato para evitar ese riesgo en el futuro.
Fuente: Periódico El Día / Foto: Daute Digital
