La carretera TF-42 que une Icod de los Vinos con los municipios de la Isla Baja sufrió este domingo 6 de enero nuevos desprendimientos, según informó el área de Carreteras del Cabildo insular y el Ayuntamiento de Icod de los Vinos. Debido a las piedras que se encontraban sobre la calzada uno de los carriles en sentido Santa Cruz, en la zona que conecta Icod con El Guincho tuvo que ser cerrado al tráfico. Las instituciones solicitaron a los conductores respetar la señalización y circular con precaución por esta zona.
La circulación en esta misma vía estuvo totalmente cortada varios días de la semana pasada, concretamente desde el pasado 1 de enero y hasta el día 3 debido a un alud que tuvo lugar a las 18:00 horas del 31 de diciembre. Las rocas cayeron en la calzada, a la altura del kilómetro 6,2 e invadieron toda la calzada hasta llegar incluso al carril bici que discurre a poca distancia.
Durante dos días, el tráfico que cada día pasa por esta carretera que utilizan sobre todo los vecinos de la Isla Baja tuvo que ser desviado hacia El Tanque por el enlace del anillo insular. Una medida que hizo aumentar en unos 20 minutos el tiempo del trayecto hasta llegar al municipio de Garachico.
Aunque se realizó la limpieza de la vía desde poco después de que se produjera el desprendimiento y se procedió a su balizamiento, las instituciones mantuvieron la vía cerrada debido al riesgo de desprendimientos de grandes piedras.
Además, el desde el día 2 una empresa especializada en la realización de trabajos verticales se sumó a la actuación que ya se venía realizando desde el día 1, lo que permitió el saneo manual y la estabilización del talud. Una vez que concluyeron estas labores, la citada empresa, en coordinación con los técnicos del área de Carreteras de la Institución tinerfeña, analizaron las medidas que se llevarán a cabo para mejorar la estabilidad del talud.
La carretera volvió a estar abierta desde el pasado jueves
Aunque no se supo apuntar con seguridad el motivo que originó estos desprendimientos, el presidente del Cabildo de Tenerife, Carlos Alonso, comentó que hay algunas conducciones de agua que atraviesan el talud en esa zona y que podrían ser el origen de la caída del talud.
Los alcaldes de las localidades más afectadas por estos desprendimientos solicitaron la semana pasada un estudio para certificar el estado del talud.