Todos los edificios de la Avenida Marítima de Garachico pasarán una inspección técnica que certifique que se encuentran en buenas condiciones. Así lo revela el alcalde de la localidad, José Heriberto González, quien explica que algunos inmuebles ya han pasado este estudio técnico y otros lo harán en las próximas semanas o meses. El objetivo es hacer una valoración que certifique al Ayuntamiento el buen estado de los mismos después de que el temporal de olas de hace aproximadamente un mes dejara al descubierto grietas en prácticamente todos los pilares de uno de los edificios de la vía, el inmueble Tomé Cano.
Según detalla el regidor, en la avenida -la zona que sufre con más vehemencia los embates del mar- hay cuatro inmuebles con viviendas y varios edificios públicos. «Algunas comunidades de propietarios, como la del edificio Atlántico -junto al Centro de Mayores y el campo de fútbol-, ya han encargado un estudio y el resto lo harán próximamente», explica González, quien agrega que, «visto lo visto, creemos que es lo mejor y lo hacemos por la propia integridad de nuestros vecinos».
No obstante, de momento el único inmueble donde se han detectado problemas es el edificio Tomé Cano que fue desalojado después de que los obreros contratados para reparar los desperfectos causados por el oleaje descubrieran importantes desperfectos en su interior. En este sentido, el mandatario garachiquense señala que las obras que se llevarán a cabo en el mismo «sobrepasarán los 100.000 euros». «No se trata de una actuación complicada pero sí costosa», puntualiza González.
La actuación, que aún no ha comenzado, consistirá en el refuerzo de todos los pilares de la planta baja. «Actualmente, se está redactando un estudio para determinar con mayor precisión los trabajos necesarios», señala el alcalde. La comunidad de propietarios también está a la espera de recibir la financiación del Consorcio de Compensación de Seguros así como las posibles ayudas públicas para poder comenzar las obras.
Regreso
El regreso de los vecinos desalojados por tanto, no se producirá «al menos hasta abril del próximo año». Así lo sostiene González, quien aclara que aunque «no podemos establecer una fecha para la vuelta, lo que es seguro es que no va a poder entrar nadie hasta que se haya restituido el problema». El inmueble, que consta de dos plantas más el ático, cuenta con doce viviendas en las que de manera habitual residían unos 39 vecinos. Según puntualiza González, la mayoría de los inquilinos se encuentran en casas de familiares hasta que se solucione la situación de sus viviendas.
En cuanto al resto de locales afectados por el temporal, principalmente negocios y algunas instalaciones municipales, el regidor norteño sostiene que algunos empresarios han empezado a reconstruir sus restaurantes y tiendas «a pesar de no haber recibido el dinero del Consorcio de Seguros». «Han pasado 31 días de los 40 que tiene el Consorcio para hacer la valoración así que esperemos que en esta semana lo hagan», destaca González.
Este retraso es el que mantiene al Consistorio sin poder actuar en las instalaciones afectadas por el fuerte oleaje, como el campo de fútbol o la piscina municipal.
Fuente: La Opinión de Tenerife